En las mesas analógicas, podemos encontrar un puente de VU que nos indica la intensidad de la señal en cada momento. Estos medidores pueden ser de agujas, o de leds, plasma o agujas.
En el caso de las mesas que utilizan VU de agujas, es muy frecuente (demasiado) encontrarnos con una o varias de las bombillas que retroiluminan los VU fundidas. Cualquier movimiento o desplazamiento, golpe, subida de tensión o similar puede hacer que se fundan las bombillas, o símplemente porque sí.
Cuando compré la Soundcraft 1600 que tengo en el estudio, todas las bombillas funcionaban, la cargamos en mi coche como si fuera un niño chico, e incluso así, cuando la monté en mi estudio, se habían fundido casi la mitad (16 bombillas fundidas de las 36 que lleva).
Las bombillas, además de no ser baratas, son un coñazo cambiarlas por el sitio tan delicado donde se encuentran y porque suelen ir soldadas con estaño, y encontrarse una mesa de mezclas con una o varias bombillas fundidas le da un aspecto viejo y descuidado.
Una opción duradera, y a la larga muy barata, es cambiar los bulbos por leds. Las ventajas es que los leds consumen menos (mucho menos), se calientan menos, duran muchísimo más y no son sensibles a los movimientos, además, podemos elegir entre los muchos colores que existen.
Los leds suelen tener una duranción de entre 20.000 y 50.000 horas, lo que puede suponer casi 6 años con la mesa encendida las 24 horas. Usando la mesa 8 horas al día (una jornada laboral normal), la modificación de bombillas por leds nos puede durar hasta 18 años. Creo que merece la pena.
Para cambiar los bulbos por leds, hay que tener en cuenta el consumo y el voltaje de cada uno, ya que los leds suelen ser de 3,3V, y los bulbos tienen un voltaje bastante superior. Si conectamos un led en vez de una bombilla, se fundirá enseguida. Para ésto, es importante medir el voltaje al que conectaremos los leds con un polímetro.
Para bajar el voltaje hasta uno “cómodo” para los leds, lo haremos con resistencias conectadas en serie.
Podemos conectar una resistencia en serie con cada led (lo que sería más trabajo) o conectar una resitencia para varios leds, lo que facilita el trabajo.
El valor de cada resistencia varía en función de cuántos leds conectemos.
En este caso, y ya que la mesa trae módulos de 4 VU, utilicé una resistencia para los 4 VU. Cada VU traía 2 bombillas, una resistencia para 8 leds conectados de la siguiente manera:
Además de no aplicarle mucho calor con el soldador de estaño, lo que podría fundir (literalmente) el plástico de los leds, hay que tener en cuenta la polaridad.
– Primero se desmonta el módulo para poder trabajar fuera de la mesa con comodidad.
– Quitamos las carcasas de los VU.
– Medimos la corriente entre los bornes del módulo.
– De-soldamos las bombillas, sujetándola con una pinza para no quemarnos.
– Soldamos los leds cuidando la polaridad.
Como la carcasa que cubre el VU tiene una franja blanca en su interior, he doblado los leds hacia afuera para que incidan en esta franja, lo que hace que la luz se difumine y el VU parezca “retroiluminado”.
– Elegimos la intensidad lumínica que queremos en los VU.
– Sabiendo la intensidad que queremos, el voltaje al que trabajan los leds y el voltaje que da la mesa para las bombillas, sabremos el valor de la resistencia que tenemos que conectar. El valor de la resistencia se mide en Ohmios, y la potencia que podrán soportar sin calentarse se mide en Watios.
– Añadimos la resistencia a la entrada de la serie de leds.
– Montamos los módulos de nuevo en la mesa.
– Encendemos la mesa y nos quedamos un rato disfrutando de cómo queda, sabiendo que ya no tendremos que cambiarle más bombillas, a no ser que nos aburramos del color que tienen y queramos darle un aspecto distinto.
Detalle de los medidores L y R con modificación terminada
Modificación terminada